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 Sebastián Godínez Rivera  ∙  Feb 14, 2023

Entre el amor y el poder: el sandinismo nicaragüense y la transición mexicana a la democracia. (II)

El fenómeno de los matrimonios que ejercen el poder conjuntamente se ha dado de forma repetida en América Latina, especialmente durante finales del siglo XXI. Algunos ejemplos como el del Kirchnerismo y el Peronismo, analizados en una entrada anterior, son los más conocidos, pero también existen otros como el de Daniel Ortega y Rosario Murillo (Nicaragua), y Vicente Fox y Marta Sahagún (México). Estos últimos se analizarán a continuación en esta entrada. El primero representa la consolidación de la pareja en el poder y su retención. El segundo, en cambios, no traspasa la temporalidad de un gobierno y culmina con el retiro de la pareja del escenario político.


El caso nicaragüense de, Daniel Ortega y Rosario Murillo, es el más reciente. Su historia se remonta a cuando ambos eran guerrilleros en los años 80 en el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN); este antes de convertirse en partido, en el año 1961 fue un grupo guerrillero que luchaba contra la dictadura de Anastacio Somoza Debayle.


Daniel Ortega se convirtió en el Coordinador de la Junta de Reconstrucción Nacional (1981-1985) y luego contendió por la presidencia de Nicaragua en 1985, cuando se convirtió en el primer presidente electo después de la dictadura. Rosario Murillo por su lado ocupó un escaño en la Asamblea Nacional de 1984 a 1990, mientras ejercía su cargo de primera dama. Ortega no volvió al poder hasta 2006, cuando Nicaragua celebró elecciones presidenciales y la marea roja estaba en su apogeo en la región.


Tras vencer en los comicios, Ortega asumió un segundo mandato como presidente. Rosario Murillo aparte de fungir como primera dama también ostentó el cargo de Coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía de Nicaragua, el cual fue creado en el primer año de la presidencia de Ortega y se encargaba de difundir los mensajes, versiones estenográficas y anuncios oficiales del gobierno, cargo que Murillo ha ejercido desde 2007.


En 2009 Daniel Ortega propuso el tema de la reelección indefinida ante la Corte Suprema de Nicaragua, la cual resolvió que limitar la reelección es violentar los derechos humanos. Con esta resolución la reelección indefinida quedó reglamentada para el partido sandinista. En 2011 Nicaragua tuvo elecciones de nuevo y Ortega se presentó para un segundo mandato, en el que resultó victorioso. Ortega y Murillo prometieron continuar con el proyecto de izquierda sandinista para lograr la “independencia y la dignificación de la sociedad” ( Ortega, 2011)


Con sentencia antes mencionada, Ortega logró postularse a un tercer mandato y retener el poder tras ganar en las elecciones de 2016. Sin embargo, en este nuevo periodo se designó a Rosario Murillo como vicepresidenta, sumado a los dos cargos que ya ostentaba. Delphine Lacombe (2020) considera que la decisión de que Murillo sea la vicepresidenta se debe a una continua desconfianza de Ortega hacia otros cuadros del FSLN, por lo tanto, que el poder quedara depositado en la pareja presidencial es una forma de cuidar todo lo construido.


El Poder Ejecutivo tras las elecciones de 2016 quedó depositado en la pareja presidencial y esto ha agravado la crisis política que vive el país centroamericano por la demanda de democracia, no represión y la búsqueda de la alternancia política. Lo que pasa en Nicaragua se ha entendido como la construcción de una autocracia, definida como “una forma de gobierno que centraliza el poder en una sola persona y con ello modifica la estructura orgánica del estado por medio de una cooptación de las instituciones del Estado” (Medina, 2007).


Ahora bien, la permanencia del poder por parte de la pareja presidencial ha generado protestas y violencia. El nivel ha sido tal que en las pasadas elecciones generales de 2021, Ortega mandó a encarcelar a 8 candidatos opositores para así mantener el poder. En esas elecciones nuevamente se presentó la planilla Ortega-Murillo para la presidencia y vicepresidencia. El Frente Sandinista ganó las elecciones de nuevo y ahora encabeza un quinto mandato. Mucho se especula sobre el devenir de Nicaragua, la única certeza es que el actual presidente se mantendrá en el poder el tiempo que pueda y una hipótesis propia sería que a la falta de Ortega, Rosario Murillo asuma el poder para continuar con el control del gobierno.


No obstante, el caso nicaragüense podría entenderse como un extremo de lo que son las parejas presidenciales. Debido a que su llegada al poder en democracia se ha transformado en una permanencia en el poder a través de la cooptación de instituciones y la implementación de la represión a cualquier persona que desafíe el poder.


Un caso que se puede encontrar en el extremo opuesto es el del caso mexicano que si bien no representó la llegada de un gobierno de izquierda al poder, si representó la alternancia democrática en México luego de la hegemonía priísta durante el siglo XX. Durante la época del PRI las esposas de los presidentes -pues en México nunca ha habido presidentas- solo cumplía con el papel protocolario de Primera Dama y Directora del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), pero esto fue diferente con la primera pareja presidencial en México.


La transición democrática que inició en 1988 y que se consolidó en el 2000 no solo trajo la primera alternancia en la presidencia, sino que Vicente Fox fue el primer mandatario en funciones que se casó con su entonces vocera Marta Sahagún. El término de pareja presidencial lo acuñó el mismo presidente Fox en una entrevista con el actor Adalberto Martínez al afirmar que “Somos una pareja que trabaja en equipo como se hace hoy en día. Compartimos decisiones y trabajamos por México, somos una pareja que quiere ver al país unido. Somos una pareja presidencial”. (El Universal, 2003).


Este es el momento donde se conoció a Vicente Fox y Marta Sahagún como la pareja presidencial. Incluso el célebre periodista Julio Scherer publicó un libro que retrata el actuar de la pareja y se titula “La Pareja”. Otras autoras como Guadalupe Loeza en el libro “Simplemente Marthita” y Olga Wornat en “La Jefa” se dedicaron a abordar las aspiraciones de Martha Sahagún, quien buscaba suceder a su esposo en la presidencia de México.


Marta Sahagún era amiga de Olga Wornat, quien considera que al rastrear su perfil político ya mostraba signos de aspiraciones presidenciales. Sobre todo a través de su fundación Vamos México, la cual se concibe como un aparato para apoyar a los sectores vulnerables del país. En su momento, el hoy presidente López Obrador llegó a mencionarla como posible candidata a la presidencia en 2004, cuando el entonces presidente era Jefe de Gobierno del Distrito Federal. Sin embargo, sus aspiraciones presidenciales terminaron cuando el entonces Presidente Fox declaró que “al terminar mi sexenio la señora Marta y yo nos retiramos de la política al rancho San Cristóbal”. (El País, 2004).


Es importante abordar los nuevos fenómenos que existen dentro de la política, que pueden parecer nuevos para la región, pero que han tenido antecedentes en otras latitudes y que son poco estudiados.


Los casos que acabo de describir, cada uno con sus particularidades nos muestran que la política y el amor no están peleados, pues pueden trascender en los gobiernos como es el caso del primer peronismo y el kirchnerismo que se han convertido en símbolos de Argentina. También pueden representar un método de retención del poder y la construcción de un personalismo como ocurre en Nicaragua. El caso mexicano es muy poco estudiado pero considero que podría representar la irrupción de las mujeres en la búsqueda de la presidencia, o al menos romper con el esquema protocolario de la Primera Dama y las funciones que desempeñan.


FUENTES


Lacombe, Delphine. (2020). Nicaragua bajo el terror de la pareja Ortega-Murillo: antecedentes y construcción progresiva de una dictadura. Trace (México, DF), (77), 146-163. Epub 13 de abril de 2021. Recuperado en 30 de noviembre de 2022, de http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0185-62862020000100007&lng=es&tlng=es.


Medina Peña Luis (2007). La invención del sistema político mexicano. Fondo de Cultura Económica. México. pp. 421.


Mendoza Carlos (2006). Aventuras en Foxilandia .Canal 6 de julio. Recuperado de: https://www.youtube.com/watch?v=QSnllmrTAns


Ortega Antonio (2004) Fox pone fin al sueño presidencial de su esposa, Martha Sahagún. El País. Recuperado el 28 de noviembre de 2022 de: https://elpais.com/diario/2004/07/08/internacional/1089237610_850215.html


Ortega Daniel (2011) Daniel Ortega llama a votar sin miedo tras ejercer su derecho al sufragio. Recuperado de: https://www.youtube.com/watch?v=qrquvOw-RKM